En Aceña de Olga, donde la ciudad se repliega para dejar paso al río, se abre este dúplex invertido que sabe combinar funcionalidad con ese punto de belleza que no busca llamar la atención, pero se deja mirar. Un piso que fluye como quien ya ha encontrado su ritmo, con entradas independientes en ambas plantas y el ascensor que entiende de comodidad, deteniéndose en cada una como si supiera que aquí todo está pensado con sentido.

Arriba, la vida social se despliega en un salón comedor amplio, de esos que piden café largo y sobremesas sin prisa. Ya hay un hueco natural esperando su librería, como si el espacio supiera que hay historias que deben quedarse. La cocina con su zona office también se abre a la terraza, que asoma al Miño como un recordatorio diario de que hay paisajes que no se compran, se heredan con la casa. Una habitación y un baño reformado completan esta planta luminosa, ideal para vivirla a diario, para disfrutarla sin esfuerzo.

Abajo, el descanso. Tres dormitorios, todos exteriores, con armarios empotrados, y un hall con alma camaleónica que puede ser recibidor, rincón de trabajo o incluso vestidor, según lo que pida cada etapa de vida. La habitación principal hace esquina y desde su ventana el río vuelve a aparecer, discreto y sereno. El baño también ha sido renovado con gusto, con ducha, ventana y un suelo vinílico que imita tejido, detalle que suma sin buscar protagonismo. La zona de colada, bajo la escalera, aporta almacenaje extra y funcionalidad sin robar espacio.

El cristal se cuela en las puertas correderas del salón y en el pasamanos de la escalera, aportando ligereza visual y un punto contemporáneo. Todo es exterior, todo respira. Y si hablamos de almacenaje, aquí hay sitio para todo: desde despensa en la cocina hasta soluciones prácticas que acompañan el día a día. Además, se entrega con trastero y dos plazas de garaje contiguas, a nivel de calle, para que llegar a casa sea, literalmente, fácil.

Un hogar con estilo, sin excesos. Cómodo, bonito, muy pensado.
DONDE LA LUZ Y EL RÍO ENCUENTRAN SU EQUILIBRIO.